Velá de Santa Ana

El calor de las noches de verano, mezclado con la brisa de la Sierra, junto con el estreno del jardín de Santa Ana tras su restauración y la inauguración de la Plaza de Nuestro Padre Jesús Nazareno fueron algunos de los condicionantes que propiciaron que, una vez más, nuestro pueblo se volcara con nuestra Hermandad.

A las 22:00h, acompañados del Señor Alcalde, toda la corporación municipal y el Señor Cura Párroco, D. Javier Naranjo comenzó la ceremonia de inauguración de la plaza. D. Álvaro Villalobos, Hermano Mayor de nuestra hermandad pronunció unas palabras de agradecimiento para el Equipo de Gobierno del Excmo. Ayto., por proponer y aprobar el nombramiento de la plaza. Del mismo modo, el Señor Alcalde, señaló la importante labor que todas las hermandades hacen por nuestro pueblo y señaló que, como lo han hecho siempre, tanto él, como todo el equipo de gobierno están a disposición de cualquiera que lo necesite para ayudar a todas las hermandades y asociaciones de Constantina. Por último, D. Javier bendijo la plaza y animó a seguir luchando por la presencia del cristianismo en nuestra sociedad, aún más en estos tiempos difíciles en los que nos encontramos.

Tras descubrir el azulejo dio comienzo oficialmente una nueva edición de la Velá de Santa Ana. Desde primeras horas de la noche el jardín y la plaza se llenaron de familias, jóvenes y mayores que pudieron disfrutar de perritos calientes, pizzas y una gran variedad de dulces hechos por los jóvenes cofrades o montaitos y bebidas en la barra de la Junta de Gobierno.

 

 

 

Tras descubrir el azulejo dio comienzo oficialmente una nueva edición de la Velá de Santa Ana. Desde primeras horas de la noche el jardín y la plaza se llenaron de familias, jóvenes y mayores que pudieron disfrutar de perritos calientes, pizzas y una gran variedad de dulces hechos por los jóvenes cofrades o montaitos y bebidas en la barra de la Junta de Gobierno.

Tras cada pase de ‘A mi aire’ la gente iba llegando y animándose, llenando la plaza. Durante los descansos, Álvaro Ávila siguió actuando, esta vez como DJ para que los ánimos no decayesen.

Así transcurrió la noche hasta las 6 de la mañana que se decidió cortar la música para no molestar más a nuestros vecinos. Un año más, el vecindario estuvo con nosotros, colaborando en todo. Hicieron dulces, nos dejaron agua y aguantaron el ruido durante toda la noche para que nuestra hermandad pudiera recaudar más dinero.

Desde aquí, una vez más tenemos que decir GRACIAS. A todo el pueblo de Constantina, a todos los que nos ayudaron porque ha sido una velá de las mejores que se recuerdan.